Vendimiado a mano, pisado con raspón, fermentación espontánea con levadura indígena del viñedo y la bodega, y criado en “cubetos” viejos de roble.
Tinto ligero de color púrpura, nariz perfumada de frutas silvestres, violeta y regaliz con gusto sabroso, refrescante y de trago largo
Marida con gente campechana y divertida… y con todo tipo de platos, desde un tradicional potaje de berzas hasta una refinada receta nikkei. Disfrútalo fresco (10-12°C), ya sea en copa, chato o porrón, pero sobre todo en buena compañía.